Si estàs buscant el millor lloc per gaudir del peix fresc i marisc de les millors llotges, el Restaurant KRAM a Andorra la Vella és la teva destinació idealRestaurante KRAM Gastro Grilling Andorra, lo mejor y exclusivo directo desde el mar a Andorra. Las cigalitas “grillo” son un fijo en nuestra carta, se conocen como cigalas “grillo” por su pequeño tamaño, las recibimos vivas todos los martes, jueves y viernes y las preparamos salteadas al ajillo para “rechupetear”, plato brutal para compartir con unas cañas de la mejor cerveza de barril, bien frescas. El hallazgo tardío de la cigala. El delicioso crustáceo, descubierto para la mesa hace un siglo, es el marisco más pescado y consumido en España después de la gamba. Muchos de los mariscos por los que hoy pagamos sumas considerables han sido en otro tiempo devueltos al mar o consumidos entre las familias de los pescadores. Es el caso de la cigala. No la encontrarán en bodegones de pintura antigua y por no tener, no tuvo ni nombre propio hasta que la irrupción de la industria del congelado a mediados del siglo XX obligó a dárselo. Un motivo añadido para esto es que el ecosistema de la cigala se reduce al Atlántico nororiental y el oeste del Mediterráneo.

Cigalitas “grillo” son un fijo en nuestra carta, las recibimos vivas todos los martes, jueves y viernes

Restaurante KRAM Gastro Grilling Andorra, lo mejor y exclusivo directo desde el mar a Andorra. Las cigalitas “grillo” son un fijo en nuestra carta, se conocen como cigalas “grillo” por su pequeño tamaño, las recibimos vivas todos los martes, jueves y viernes y las preparamos salteadas al ajillo para “rechupetear”, plato brutal para compartir con unas cañas de la mejor cerveza de barril, bien frescas.

El hallazgo tardío de la cigala. El delicioso crustáceo, descubierto para la mesa hace un siglo, es el marisco más pescado y consumido en España después de la gamba.

Muchos de los mariscos por los que hoy pagamos sumas considerables han sido en otro tiempo devueltos al mar o consumidos entre las familias de los pescadores. Es el caso de la cigala. No la encontrarán en bodegones de pintura antigua y por no tener, no tuvo ni nombre propio hasta que la irrupción de la industria del congelado a mediados del siglo XX obligó a dárselo. Un motivo añadido para esto es que el ecosistema de la cigala se reduce al Atlántico nororiental y el oeste del Mediterráneo.

A la hora de comprar cigalas, hay varios indicativos que nos ayudarán a escoger. El primero, el precio. Desconfíe de las gangas. Segundo, que la tonalidad del lomo sea rosada y no ennegrezca en la cabeza, que conserve el brillo del mar (se pierde al ser descongelada) y que la zona ventral sea brillante y traslúcida. 

En la cigala es más apreciada la hembra del macho. Este suele ser más grande y en la zona inferior tiene un pequeño par de aguijones bajo las patas superiores que en la hembra son apenas dos pelillos finos. 

TEXTO ORIGINAL de: https://www.elcorreo.com/jantour/despensa/hallazgo-tardio-cigala-20200110094453-nt.html